Tras dos años «desaparecido», sin comparecer en ninguna plaza española desde esta tarde del 9 de septiembre de 2016 en Valladolid, sin conceder, por supuesto, entrevistas ni aparecer en ningún medio, vuelve José Tomás a los ruedos.
Será ese misticismo que genera, saber que cuando se anuncia en un cartel (aunque se lleve sus tres toros como esta tarde en Algeciras) es una oportunidad única para verle, o será saber que «donde otros ponen la muleta, José Tomás pone su cuerpo», o será seguramente la mezcla de todo, pero por unas cosas u otras, JT es único y el ambiente cuando torea es distinto. Los abonos vendidos desde que salen a la venta allá por donde toree, la reventa funcionando como hace años funcionaba en esta «fiesta», y la expectación por las nubes.
Esperemos que se anuncie en más plazas este año y salga de Andalucía, que todo el mundo quiere disfrutar de su toreo, uno de los más completos del escalafón, conjugando valor y arte, verdad y pureza con el capote, la muleta, y por supuesto, la espada.
Vuelve José Tomás, no hay más. El mundo del toro se paraliza.
Crítica taurina 
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